jueves, agosto 07, 2008

Sobre el perdonar...Susuru. A partir de un fragmento de Clarissa Pinkola Estés: "Mujeres que corren con los lobos"

“El perdón es la culminación de todo lo precedente, toda la tolerancia y todo el olvido. No significa abandonar la propia protección sino la frialdad. Una forma muy profunda de perdón consiste en no excluir al otro, en dejar de mantener distancias, ignorar o comportarse con frialdad o mantener actitudes falsas o condescendientes. Para la psique del alma es mejor limitar estrictamente el tiempo y las respuestas mordaces a las personas cuyo trato nos resulta difícil que comportarnos como maniquíes insensibles. El perdón es un acto de creación. Se puede otorgar de muy variadas maneras. Se puede perdonar de momento, perdonar hasta entonces, perdonar hasta la próxima vez, perdonar pero no dar más oportunidades; el juego sería totalmente distinto si se produjera otro incidente. Se puede dar otra oportunidad, varias o muchas oportunidades o dar oportunidades con determinadas condiciones. Se puede perdonar en parte, en su totalidad, o la mitad de una ofensa. Se puede otorgar un perdón general. La mujer es la que decide. ¿Cómo sabe la mujer si ha perdonado o no? En caso afirmativo, tiende a compadecerse de la circunstancia en lugar de sentir cólera, tiende a compadecerse de la persona en lugar de estar enojada con ella. Tiende a olvidar lo que tenía que decir al respecto. Comprende el sufrimiento que dio lugar a la ofensa. Prefiere permanecer al margen. No espera nada. No quiere nada. Ningún estrecho lazo alrededor de los tobillos tira de ella desde lejos para arrastrarla hacia acá. Es libre de ir a donde quiera. Puede que la cosa no termine con un “vivieron felices y comieron perdices”, pero a partir de ahora estará esperándola con toda certeza un nuevo “Había una vez”

música: cuentos de los bosques de viena Releyendo lo que escribe la autora una y otra vez, no sólo que me doy cuenta de la importancia que tiene el perdonar desde quien perdona, sino todas las acciones beneficiosas que se generan y multiplican a partir de ese perdón, que puede ser total, parcial, con algunas especificaciones concretas, como se quiera o se pueda dar ese perdón según el momento y las circunstancias. Pero lo más destacable, es que de ese accionar deriva un estado de libertad, una sensación de tranquilidad, de paz que va acabando con sufrimientos, con padeceres sin sentido. Yo me quedo pensando acerca de este post. Seguramente me generará nuevos interrogantes y otras muchas respuestas. Pero me digo a mi misma que la libertad y la dignidad no son negociables, por lo tanto el perdonar y cómo lo hagamos valdrá la pena.....Sigo pensando, quizás alguien más quiera proponer algo sobre esta temática. susuru

3 comentarios:

JoP dijo...

"El perdón es un acto de creación".

"Una forma muy profunda de perdón consiste en no excluir al otro".

Me gustaron estas afirmaciones. Las tomo y me quedo pensándolas.

Besos.

SUSURU dijo...

Sí, Jop, son afirmaciones como para seguir pensándolas, las sentí muy sabias, después de todo lo que hemos estado hablando.
besote

Anónimo dijo...

Alguna vez una maestra dijo: " Las personas actúan en base a sus heridas ". Creo que cuando perdonamos, somos capaces de hacer saber que nuestro interior ha sanado. Perdonar nos beneficia más a nosotros mismos que para continuar o mejorar la relación con otros.
Tere.