martes, octubre 13, 2009

La leyenda del Hornero

Cuentan que en las tribus que habitaban a orillas del río Paraguay, cuando los muchachos llegaban a cierta edad debían pasar tres pruebas. La primera consistía en correr muy rápido, mucho más que el viento veloz.
Para superar la segunda tenían que nadar de un lado al otro del río. Por último debían cumplir con un extraño ritual: quedarse acostados sin moverse, muy quietos, tan quietos que no podían ni siquiera pestañear, durante un largo tiempo. Todos los jóvenes de esa tribu se entrenaban con gran dedicación para poder pasar esa prueba. Aprobarla, significaba pasar a ser adultos.
Una vez existió un joven llamado Jahé que sorprendió a todos con su destreza. Cuando le tocó realizar la primera prueba, muy pronto dejó atrás a los demás competidores. Cuando cruzó el río, mientras los otros luchaban para que la corriente no los llevara, él juntaba piedritas de colores que encontraba en el fondo. Cuando debió permanecer acostado, el se mantuvo tan quieto, que por más que saltaban, y hacían bromas a su alrededor, él permanecía inmóvil como una piedra.
Así Jahé, pasó ha ser un adulto. Lo que nadie sabía era que mientras el joven corría, en las alas del viento escuchó la voz de una mujer como el canto de un ave. Esa misma voz fue la que lo alentó mientras cruzaba el río Paraguay y la que le permitió concentrarse cuando debió permanecer quieto.
Como era costumbre en esa época, el jefe de la tribu premió a Jahé concediéndole la mano de su hija. Jahé no podía aceptar ese ofrecimiento, pues la melodía que escuchó durante la prueba lo acompañaba día y noche. Jahé se había enamorado. El jefe de la tribu comenzaba ha impacientarse por la falta de decisión del joven.
Una mañana el muchacho elevó sus brazos al cielo pidiendo a su amada que lo ayudara a decidir. Entonces volvió a escuchar su voz. Las manos de Jahé comenzaron a moverse al compás de una suave música, hasta que tomaron el movimiento de las alas de un pájaro. Los que observaban la escena vieron con asombro cómo el cuerpo del joven comenzaba a transformarse en un pájaro y se perdía volando en el aire. El ave era de color pardo y desapareció en los bosques que bordean el Paraguay. Buscó entre los árboles a su amada pero no la encontró.

Construyó una casita de barro para resguardarse de los rayos, los vientos y las lluvias. Por fin una mañana la dulce cantora se posó en su nido y desde entonces es su compañera.

........................................................... El nido ha definido al hornero; su nombre mismo se refiere a él. Y no sólo el que recibe en la Argentina, sino también otros con que se lo denomina en distintas regiones de América: Caserito, Casero, Albañil, João–de–barro. En épocas de nidificación, las glándulas salivales del hornero se hipertrofian y garantizan una mayor secreción que ayuda a humedecer el material. Muchos lugares encuentra apropiado el hornero para levantar su nido. Pueden construirlo en sitios inesperados para nosotros, como por ejemplo en vasijas abandonados o alambres de púas, y a veces en otros francamente insólitos. El tipo de terreno y la abundancia de lluvias deciden la construcción del nido en cuanto de ellos dependen la obtención de los materiales y la duración de la tarea. Casi siempre el casal tarda entre 6 y 8 días para levantar el nido, pero si hay sequía la labor requiere cuatro días más y varios otros en el caso contrario, cuando la humedad es excesiva (en terrenos pantanosos demora 15 días). Llegado el momento propicio y elegido el lugar, el casal pone manos a la obra o mejor dicho el pico, porque con éste amasa el barro que constituye la materia prima por excelencia, a la cual agregan ramitas, raicillas, semillas pequeñas, crines de caballo, pajitas, y restos de hojas. El nido tiene dos partes: (“tiene una sala y tiene alcoba”como dice el poema de Leopoldo Lugones) una cámara anterior, separado por un tabique de la posterior o cámara de incubación o de cría. Se construye en tres etapas. En la primera se realiza la base. Cuando el espacio elegido para el nido es plano, hacen un círculo con el barro; si es una rama van poniendo barro a los costados hasta formar un disco cóncavo. En la segunda etapa se levanta la pared colocando el barro desde el centro del basamento y en el círculo, de manera que el diámetro se va estrechando a medida que la pared asciende hasta cerrar la bóveda y deja una abertura que funciona como entrada. En la tercera etapa, en la cual el hornero trabaja desde dentro del nido y mirando hacia fuera. Faltan ya unos pocos detalles: alisar las paredes internas a picotazos o frotando con el pecho y recubrir el piso de la cámara de incubación con pajitas y plumas para asegurarse que sea mullida y cálida. El nido está listo. Es firme, sólido y con una distribución realmente adecuada.A partir de entonces se lo cuida con esmero, reparándolo cada vez que sea necesario.

33 comentarios:

SUSURU dijo...

Poema de Leopoldo Lugones

EL HORNERO

La casita del hornero
tiene alcoba y tiene sala.
En la alcoba la hembra instala
justamente el nido entero.

En la sala, muy orondo,
el padre guarda la puerta,
con su camisa entreabierta
sobre su buche redondo.

Lleva siempre un poco viejo
su traje aseado y sencillo,
que, con tanto hacer ladrillo,
se la habrá puesto bermejo.

Elige como un artista
el gajo de un sauce añoso,
o en el poste rumoroso
se vuelve telegrafista.

Allá, si el barro está blando,
canta su gozo sincero.
Yo quisiera ser hornero
y hacer mi choza cantando.

Así le sale bien todo,
y así, en su honrado desvelo,
trabaja mirando al cielo
en el agua de su lodo.
Por fuera la construcción,
como una cabeza crece,
mientras, por dentro, parece
un tosco y buen corazón.

Pues como su casa es centro
de todo amor y destreza,
la saca de su cabeza
y el corazón pone adentro.

La trabaja en paja y barro,
lindamente la trabaja,
que en el barro y en la paja
es arquitecto bizarro.

La casita del hornero
tiene sala y tiene alcoba,
y aunque en ella no hay escoba,
limpia está con todo esmero.

Concluyó el hornero el horno,
y con el último toque,
le deja áspero el revoque
contra el frío y el bochorno.

Ya explora al vuelo el circuito,
ya, cobre la tierra lisa,
con tal fuerza y garbo pisa,
que parece un martillito.

La choza se orea, en tanto,
esperando a su señora,
que elegante y avizora,
llena su humildad de encanto.

Y cuando acaba, jovial,
de arreglarla a su deseo,
le pone con un gorjeo
su vajilla de cristal.

JoLuis dijo...

Qué belleza de música, no la conocíoa.

Y la leyendo me puso romántico.
Cómo me gustaría construir un nido seguro si encontrara a la pareja que quiera compartirlo conmigo.

besos

JoLuis dijo...

jugamos con Uruguay!!!
qué pálpito fulero que tengo.
vos que pensás? nos mandan a casa?
Salu2

felix dijo...

¡Que bello relato¡ Yo siempre que escucho "Dicen que..." imagino que esa leyenda por un momento que esa Leyenda pudo ser cierta. Y me deje llevar por las alas de la imaginación aupado por tu relato y me imaginé a Jahé, mirando al cielo, pidiendo ayuda a su amada a que le ayudadara a decidir, y trnasformarse en Hornero. No conocía este ave, no conocía la Leyenda, y tu me has aportado ese conocimiento. Me ha gustado mucho (será porque soy un amante de las Leyendas, o por lo bien contado que estaba). Sea por lo que sea, he disfrutado. Besossss

FABIA dijo...

Qué historia mas bonita, la canción la conozco y tambien es bellisima, asi como el poema que lo describe tan bien, pero no conozco ese pajarito ¿cómo es?.
Besinos Susu.

Flor dijo...

Su, y vos que pensás van a ganar???

Hoy tu entrada esta deliciosa, tierna, excelente.El cuento del pajarillo me encantó!!! Hasta parece que tiene a ver com mi entrada???? Libertad para encontrar la felicidad, el verdadero amor.
Sabes que me gustaria muchisimo ser "orbservadora de pájaros", ahí en Argentina debe haber esos grupos tal como aqui.
La musica esta especial, muy linda, ya la anoté para seguir oyendola.
Gracias querida, para mi fué un lindo despertar.

Besos y cariñitos
Flor

Maie dijo...

Por Dios...que hermosa es la naturaleza debe ser un espectaculo observar la construccion de ese nido...

Anónimo dijo...

ME encantan las leyendas ya d epor sí, pero esta me ha parecido espectacular. Un beso

Cecy dijo...

Es admirable como construyen sus nidos, la paciencia y dedicación, que sabios son y cuanto deberiamos aprenser de ellos.

Precioso.

Besos.

isis de la noche dijo...

Mira tú mi querida amiga...

Todo un mundo en una casita.. Todo el misterio del tiempo y del amor en una leyenda que me ha hecho recordar lo que se siente saber de dónde uno viene.. y no desear nada más en la vida que volver al hogar....

Precioso relato amiga.. mágico instante el que nos regalas..

besos miles y un abrazo inmenso!!!

Liliana Lucki dijo...

Es una belleza de relato.

He disfrutado de ver la construcción

de uno y sus propietarios.

Compartí momentos increíbles.

Los pájaros nos pueden enseñar muchísimo.

Mi saludo Liliana

Patricia dijo...

Susu, qué bonitooo!!!
Me encantan los horneros, y esta leyenda, que encierra misterio y vida.
Adoro escucharlos cantar frente a mi ventana todos los días, entremezclando su canto con el de otros pájaros, ver sus hermosos nidos tan fuertes que resisten las lluvias y las tempestades.
Besos, linda.

mumy de neuquen dijo...

♥ No sé cómo llegué hasta tu casita...- Las casualidades no existen- Volveré a visitarte para seguir conociendo tu espacio ;)¡¡¡Gracias por compartirlo!!!♥
mumy
http://mumydeneuquen.blogspot.com

ILUSION dijo...

Hola Susuru,,,,es una hermosa historia que me encanto leer y una canción maravillosa que me dió gusto escuchar,,,gracias amiga!!!!
Besitos!!!!

Anónimo dijo...

Cuantas leyendas y pequeñas historias en nuestra Amèrica...

Gracias por darme a conocer esta ave, no sabìa de su existencia.


Mis cordiales saludos

Marina dijo...

Preciosa la leyenda, el poema me lo recitaba mi mamá, y qué bien nos representa este post!
Besotes.

Jota Ele dijo...

Bellísima historia, Susuru, que merecería ser verdad. Realmente emocionante.

¡Qué sabios son los animales! ¿Verdad?

Un placer haber visitado tu blog. Si no tienes inconveniente, voy a enlazar tu blog con los míos a fin de seguirte puntualmente.

Un cordial saludo desde Madrid.

Rita Blanco dijo...

La canción la conocía, pero la leyenda, no. Es muy hermosa.

Y tu descripción tanto sobre el Casero y su forma de construir el nido muy buena.

Felidides

Sofi

SUSURU dijo...

JOLUIS: Argentina ganó en fútbol, imagino que estarás contento y que siga el romanticismo que no le hace mal a nadie.
Salu2

SUSURU dijo...

FELIX: me siento dichosa que hayas encontrado una leyenda de mi país que no conocías.
pasaré a visitarte.
Saludos

SUSURU dijo...

Fabia: el pajarito (hornero) si es que a él te refieres, es el que está en el post.
besos

SUSURU dijo...

FLOR: en el fútbol Argentina clasificó finalmente.

Sí en mi país hay grupos que estudian a los pájaros y su modo de vida en disferentes hábitats.
beso

ROBERTO dijo...

te dejo la letra de la canción PÁJARO CAMPANA, que ví que pusiste la música.
Supongo que elegiste este tema porque al inicio realmente parece el canto de un pájaro y yo imaginé a la enamorada que le cantaba hasta que él mismo se volvió pájaro, pero hornero.

En la selva paraguaya que de flores se perfuma
late un corazón de plumas y aletea una ansiedad
es el secular tañido es la guaraní esperanza
se escucha más no se alcanza ni se puede aprisionar.

Alucinante guyrá campana
luz que florece sobre una rama
allá va alegre y bravío
tu canto es el mío
amor e ilusión con el ding - dong
de tu trinar.

Igual que un trino que vuela perdiéndose en lontananza
va la voz de la esperanza hecha pluma musical
como el cóndor de los Andes, y el Ketzal de Guatemala
tu nombre guyrá campana simboliza libertad.

De la roja tierra
al azul del cielo
tu blanco plumaje
une dos anhelos
allá va alegre y bravío
tu canto es el mío
amor e ilusión
con el ding - dong, ding - dong, ding - dong
ding - dong, ding - dong, ding - dong de tu trinar.



besos, buen finde!!!!

si no vuelvo a aparecer por aquí, para el domingo FELIZ DÍA DE LA MADRE.

QUE DISFRUTES MUCHO JUNTO A TUS HIJOS QUE TANTO TE ADORAN!!!!

Unknown dijo...

hay gente sin techo, y hay pájaros que hacen estas maravillas.

besos

Amélia Ribeiro dijo...

Hola SUSURU!

Gracias por visitarme…

y ¡perdón si no te visito con la frecuencia que me gustaría, pero mi tiempo ahora es muy corto!

¡Preciosa la leyenda del hornero, es una hermosa historia que me encanto leer!

¡Un beso enorme!

Lidia M. Domes dijo...

Lindo todo!

Como siempre...

Un abrazo muy fuerte,

Lidia

Melibea dijo...

¡Hola, maja! Que te mejores pronto. Un abrazo fuerte.

Te dejo leche chocolatada con unas pastas, así te dará fuerzas.

Besos

FABIA dijo...

Querida Susu, tienes un regalo en mi casa, pasa cuando quieras a recogerlo.
Cuidate mucho, pienso en ti.
Besinos.

SUSURU dijo...

A TODAS
A TODOS

dejo esta reflexión que está muy emparentada con el post.

EL AMOR Y LA PACIENCIA

Nada nutre más al amor que la paciencia.

Es la cualidad que nos ayuda a esperar, entender y tener esperanzas.

A veces parece quedar olvidada en un mundo que avanza a doble velocidad.

La paciencia significa mantener la serenidad y la contemplación frente a las desilusiones y los fracasos. No obstante, queremos acción, queremos soluciones, queremos respuestas. Y queremos que lleguen inmediatamente.

Esta filosofía es la responsable de juicios apresurados, que causan mucho dolor y desesperación innecesarios.

En el amor, las respuestas más importantes llevan tiempo, y ese tiempo debe estar lleno de esperanzas y vacío de presiones.

Muchos problemas son sólo sombras que generalmente desaparecen si se tiene paciencia.

Aquellos que realmente aman aprendieron a enfrentar los tiempos difíciles con alegría.

El premio más grande de la paciencia es el amor duradero.


Leo Buscaglia

besos y buen fin de semana

Rina dijo...

siempre, siempre aprendiendo de las aves....... sobretodo de ti.
abrazo,
ini

Molo dijo...

Me encantó el relato de la leyenda, su alto contenido poético.
Un beso grande,

Rorry_la Charo dijo...

Hola SUSU
Volví a la infancia, cuando leía todas las leyendas que circulan en nuestro paìs.
¿Sabés? Tengo entendido que los horneros vuelven todos los años a su nido y, a veces, tienen que peler por ellos pues otras aves los ocupan cuando ellos se van.
Cuando vuelven, los reparan como albañiles diligentes y luego vuelven a anidar.
Un beso
Gracias a tus comentarios, que siempre me incentivan
Un beso
Rorry
PD Otra bella leyenda para postear es la del palo borracha (ideal para el día de la madre ¿no te parece?

JJ dijo...

Un relato bellísimo. SUSURU , y un placer estar en contaco de nuevo.
Gracias por la visita
Un abrazo